.: La estrategia #ObjetarEsUnDerecho se desarrolla en diferentes zonas de la ciudad, gracias a la articulación entre las secretarías de la Juventud, de la No-Violencia y de las Mujeres. 

.: A través del Sistema de Alertas Tempranas de Medellín -SATMED-, la ciudad cuenta con una ruta de atención para los jóvenes que deseen declararse objetores de conciencia frente al servicio militar. 

.: La Administración Municipal instaló la mesa permanente de seguimiento a los fenómenos de reclutamiento ilegal, batidas y procedimientos irregulares de incorporación.

Palabras de Santiago Bedoya, secretario de la Juventud.817 Kb

Palabras de Juan Carlos Upegui, secretario de la No-Violencia.556 Kb

Palabras de Ana María Valle, secretaria de las Mujeres.717 Kb

La Alcaldía de Medellín lidera la estrategia #ObjetarEsUnDerecho para acercar a las juventudes al tema de la objeción de conciencia y brindar garantías a quienes decidan objetar al servicio militar obligatorio. Se trata de un derecho fundamental cuyo acceso se ha visto limitado para la población joven, en muchos casos, por desconocimiento frente a sus rutas.

«Tradicionalmente, los jóvenes han sido instrumentalizados para la guerra y el conflicto. En las últimas semanas hemos recogido la angustia y la ansiedad de muchos de ellos frente al proceso de incorporación y reclutamiento que el Ejército Nacional viene desarrollando en la ciudad. Queremos brindarles a ellos garantías y acompañarlos en los procesos que cuenten con arbitrariedades e irregularidades. Sobre todo, queremos contarles que existe una alternativa, que la objeción de conciencia es un derecho constitucional», expresó el secretario de la Juventud, Santiago Bedoya.

La estrategia incluirá procesos de formación en objeción de conciencia y en no violencia activa para así promover la formación política e instalar la conversación sobre la objeción de conciencia en las agendas públicas de la ciudad.

La Administración Municipal, por medio de la Secretaría de la Juventud, la Secretaría de la No-Violencia y la Subsecretaría de Derechos Humanos, abrió un diálogo interinstitucional frecuente con entidades del Estado, como el Ejército, la Personería Municipal, la Procuraduría y el Metro de Medellín, además de actores de la sociedad civil, para proteger la libertad de los jóvenes frente al reclutamiento. Se creó, así, una mesa permanente de seguimiento.

«El propósito es sensibilizar a los jóvenes de la ciudad en torno a las rutas que tienen para ejercer su derecho a la objeción de conciencia sobre el servicio militar. También es importante recordar que las víctimas del conflicto armado, palenqueros, negros e hijos únicos están exentos de prestar servicio militar obligatorio», señaló el secretario de la No-Violencia, Juan Carlos Upegui.

Paralelamente, la estrategia busca, a través de los agentes de cuidado de la Secretaría de la Juventud y Parceros de No-Violencia, así como de las gestoras de igualdad y masculinidades corresponsables y no violentas de mujeres, hacer presencia en diferentes puntos de la ciudad para sensibilizar a la ciudadanía sobre la objeción de conciencia y acercarles a los jóvenes los mecanismos de acompañamiento institucional frente al reclutamiento militar.

«En nuestra misionalidad de caminar hacia la igualdad entre hombres y mujeres promovemos las masculinidades corresponsables y no violentas. Estamos acostumbrados a que la valentía se forma en los campos de batalla o sosteniendo las armas, pero realmente hay otras formas de ser valientes en el cuidado de la familia, en las aulas de clase, en la participación social y política», afirmó la secretaria de las Mujeres, Ana María Valle.

En Colombia, cualquier joven con convicciones contrarias a la violencia, al conflicto armado y al uso de armas puede declararse como objetor de conciencia al servicio militar obligatorio. Quien decida hacer uso de este derecho debe presentar su solicitud de objeción escrita o verbal ante el distrito militar en el cual se encuentre inscrito.

“Los jóvenes pueden tener esa conciencia, que pueden decirle a la ley ‘no’, pero de una manera legal y jurídicamente validada por la jurisprudencia colombiana,” dijo Cristian Rojas, defensor de Derechos Humanos, y agregó que “debemos partir de que en el artículo 18 de la Constitución se habla de la libertad de conciencia, así como en el artículo 18 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos; libertad de conciencia que viene aunada a la objeción de conciencia y más al servicio militar. Nada más, el año pasado, se acompañaron diferentes casos de jóvenes que decían ‘no’ a la violencia”.

A través del Sistema de Alertas Tempranas de Medellín -SATMED-, la Administración Municipal lidera un protocolo para la reacción inmediata frente a las irregularidades que se presenten en el reclutamiento militar y dispuso una ruta de atención para acompañar a los jóvenes en caso de que haya vulneración a su derecho a la libertad de conciencia o existan factores de riesgo asociados.

La Alcaldía de Medellín, en su misionalidad de acompañar y sensibilizar a jóvenes sobre sus derechos y frente alguna vulneración de los mismos, cuenta con canales de comunicación y denuncia: www.medellin.gov.co/satmed o el Whatsapp 310 715 4095.