Sobrevivientes

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Foto: Leidy Alexa Mosquera Córdoba. Fotógrafo: Foto Alcaldía de Medellín 2021-01-28 Sobrevivientes Por: Secretarías de Suministros y Servicios y de Participación Ci...

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  • Foto: Leidy Alexa Mosquera Córdoba.

    Fotógrafo: Foto Alcaldía de Medellín

    2021-01-28

    Sobrevivientes

    Por: Secretarías de Suministros y Servicios y de Participación Ciudadana

    En el año 2000, 374 ranchos de madera y cartón fueron pulverizados por el fuego en un incendio que arrasó por completo con Vallejuelos, un barrio de invasión ubicado en la comuna de Robledo, en cercanías de la carretera al mar. Más de 1.800 personas se vieron afectadas, y todas ellas debieron ser reubicadas para que pudieran continuar con sus vidas.

    Casi el total de esas familias pasaron a vivir en el Mirador de Calasanz, un gigante edificio de cemento sobre el lomo de un cerro alrededor de la quebrada La Iguaná.

    Leidy Alexa Mosquera Córdoba es una de esas sobrevivientes que padecieron el incendio de Vallejuelos y ahora tienen otra oportunidad sobre la tierra. Cuando el hecho ocurrió apenas tenía 17 años de edad y pertenecía a un grupo de danza que se presentaba de vez en vez en varios eventos de ciudad. También eso se terminó con el incendio.

    Lo que no se llevó el fuego fueron las ganas de ayudar a los demás de Leidy, quien desde pequeña siempre ponía sus manos e inteligencia al servicio de sus vecinos.

    “Yo ayudaba a hacer los pesebres en Navidad, y también me iba por los almacenes y las casas pidiendo colaboración para los regalos de los niños, para las novenas”, cuenta la joven, quien lleva ocho años como líder comunitaria en el Mirador de Calasanz.

    En el sector, cerca de los barrios Blanquizal y Olaya, habitan unas cinco mil personas en 45 torres de apartamentos. La reubicación ocurrió hace 17 años y la Junta de Acción Comunal se fundó hace 15. A Leidy, por ser tan joven, no le tocó casa propia, pero se las arregló para acomodarse con sus hijos, sin dejar de ayudar a los demás.

    “Nuestra comunidad es muy afro y como afros nos mantenemos muy unidos para todo. Yo pertenezco a la Junta de Acción Comunal desde hace muy poco, pero considero que la Junta es el intermediario propicio entre las comunidades, el gobierno y las demás organizaciones. Con ellos mantenemos viva la comunicación, y esa comunicación activa la participación. Y la participación es democracia”, dice Leidy, presidenta de la JAC.

    La joven, quien siempre saca tiempo para escuchar a su comunidad y rendirle cuentas de los procesos, considera de gran importancia el Día Blanco, oportunidad única para conectarse con todas esas personas que todavía mantienen vivo el recuerdo de su crudo pasado.

    “La nuestra es una comunidad que ha vivido momentos muy difíciles, pero hemos podido salir adelante con la ayuda de la Alcaldía y con nuestros propios esfuerzos. También, con el presupuesto participativo, hemos logrado traer salud, empleo y bienestar para todos. Por ejemplo, a muchos les hemos dado la posibilidad de ortodoncias, a niños y adultos mayores, y eso no se ve todos los días”, explica Leidy, quien ya no se dedica a la danza, pues todo su tiempo lo invierte en la solidaridad.

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