Nuestra misión es servir

En 1971 el alcalde de ese entonces, Álvaro Villegas Moreno, decidió crear, mediante el Acuerdo N°12 de septiembre 6 de 1971, mediante el cual se crea la Secretaría de Transportes y Tránsito de la ciudad.

En el marco del Día del Agente de Tránsito, la Alcaldía de Medellín exalta la labor de los que están al servicio de la ciudadanía para proteger vidas en las calles y hoy les contamos la historia de Rubén Darío Montes, agente de tránsito por tradición familiar.

Montes inició su labor hace 40 años y, cuando le preguntamos por qué decidió ser agente de tránsito, su voz se llenó de orgullo y nos dijo que es un tema de historia familiar: su papá fue parte de los agentes de Tránsito Departamental, en la década de los cuarenta.

Don Rubén cursó su bachillerato en el Colegio, Marco Fidel Suárez. Cuando estaba en hora de descanso, se iba cerca del estadio a verlos trabajar. Era el espacio para aprender la profesión que como lo afirma, “se convirtió en mi obsesión”.

“Yo me iba para donde ellos y les preguntaba de todo. Yo les decía que mi papá también era agente de tránsito y que yo quería serlo”, asegura.

El 29 de diciembre de 1980 decidió postularse a la Universidad Nacional para estudiar Arquitectura, pero no quedó. Su segunda opción fue estudiar Artes Plásticas, pero, su objetivo nunca cambió y cuando abrieron las convocatorias para ser agente de Tránsito no lo pensó dos veces y dejó la carrera en el primer semestre. Desde ese entonces, empezó a construir su sueño.

“Soy agente de Tránsito 24/7. Cuando no estoy de servicio, estoy leyendo y actualizándome sobre las normas, trato siempre de que mis compañeros estén actualizados y hagan su trabajo de la mejor manera posible y por eso leo mucho”, dice Montes.

Él ama servir a los demás, le gusta saber que es útil a la sociedad desde su conocimiento. Su día empieza muy temprano y lo reparte entre su familia conformada por sus dos hijos, nieto y esposa, Luz María Mejía Gómez, quien ya se jubiló de esta misma profesión, ahora lo apoya en todos los proyectos.

Además de ser Agente de Tránsito, Rubén es profesor en la Universidad Adventista de Colombia, donde dicta la Tecnología en atención prehospitalaria y es bombero voluntario de Envigado.

En el poco tiempo libre que le queda, don Rubén busca la manera de explicar las normas de forma didáctica a las nuevas generaciones de agentes y también creó un grupo de WhatsApp, donde sus colegas de todo el país recurren a él cuando no tienen muy claras las normas en los procedimientos. 

Como don Rubén, hay muchos agentes en las calles, unos regulando el tráfico, otros ayudando en medio de un accidente o en las zonas de estacionamiento, que contribuyen a que Medellín avance hacia una #Ecociudad.