Agricultores de los corregimientos aumentan su productividad con invernaderos subsidiados por la Alcaldía

Yonnathan Celis es uno de los 41 productores agrícolas que han recibido apoyo de la Alcaldía de Medellín, para mejorar su infraestructura para la producción. Espinaca, coliflor, brócoli, tomate chonto, cherry, pimentón, rábano, cilantro y cebolla larga son algunos de los vegetales que cultiva en su casa, en la vereda San José de la Montaña del corregimiento San Cristóbal.

Él y toda su familia viven de su actividad productiva en el campo. La jornada en los cultivos empieza desde las 3:00 a. m., “para que rinda el día, porque la cebolla hay que cogerla antes de las nueve para que no se pasme”, asegura. Hace una pequeña pausa, cuando ya es de día, para llevar a sus dos hijas al colegio, y retoma las labores propias de su negocio: fumigar, desherbar, abonar, regar. Así se le va el día.

Yonnatan tiene 31 años, es tercera generación; su abuelo fue el primero en llegar al corregimiento a trabajar como mayordomo en una finca, y ahí aprendió a cultivar la tierra. A pesar de la tradición familiar, este joven no siempre creyó que ser agricultor era una opción de vida. Se graduó como técnico industrial y, durante muchos años, probó suerte como tornero en una fábrica con sede en el sur del Valle de Aburrá, hasta que decidió que “no quería trabajar para ningún patrón”, como él mismo lo dice, y se metió de lleno a trabajar con su papá, don Saúl, y su hermano en los cultivos.

Hoy tienen casi una hectárea sembrada y producen más de una tonelada de cebolla al mes, esto sin contar otros productos, como el tomate, “que es más complejo de cultivar porque el tiempo de producción es de tres meses, mientras que la cebolla la saco en 45 días, pero lo sigo sembrando porque es el gancho para vender muchos productos. El que viene por tomate, siempre se lleva algo más”, explica.

Tiene cultivos a cielo abierto, pero también en invernaderos. Desde hace unos 6 años convenció a su papá de explorar opciones para tecnificar el proceso y probar con cultivos techados. Con apoyo de una cooperativa instalaron el primer invernadero y, en poco tiempo, comprobaron los beneficios: “aquí yo puedo controlar el riego, aparecen menos plagas, y necesito menos plaguicidas y menos insumos para producir, entonces el beneficio no es solo que todo me sale de mejor calidad y en mayores cantidades, sino que también me sale más barato producir en invernadero que a cielo abierto”, dice Yonnatan, mientras nos señala la diferencia de aspecto entre los manojos de cebolla de un cultivo y otro.

En 2024, él fue uno de los beneficiarios que recibió apoyo de la Alcaldía de Medellín en infraestructura productiva, y pudo instalar un nuevo invernadero para ajustar cerca de 3.000 metros de cultivos bajo techo. Con él son 41 los participantes que han recibido invernaderos nuevos, reparaciones de invernaderos antiguos o marquesinas para mejorar la producción, con una inversión que supera los $120.000.000.

“Además de infraestructura, los productores agropecuarios pueden acceder a incentivos para compra de insumos y herramientas; formación, capacitación y asesorías para la extensión agropecuaria; créditos con posibilidad de condonar hasta un 30% del capital adeudado; vitrinas de comercialización como los Mercados Campesinos, entre otros. Nuestro programa distrital agropecuario está diseñado para impulsar a nuestros campesinos productores, porque sabemos de la importancia de su rol en la economía de sus familias y de la ciudad”, asegura la Secretaria de Desarrollo Económico, María Fernanda Galeano.

Ahora Yonnatan tiene el reto de avanzar en la tecnificación de sus cultivos y, por eso, quiere automatizar el sistema de riego para poder controlar más la humedad. Sabe que está joven y que tiene toda la energía para ser agricultor por muchos años más, pero, desde ya, le preocupa pensar en que el campo de nuestra ciudad necesita nuevas generaciones que quieran meterle la ficha a la economía agropecuaria. “Es un compromiso de todos, tanto de quienes se dedican a cultivar los mejores productos que llegan a nuestras mesas, como de quienes los consumimos.

Todos estamos llamados a aportar en la construcción de una nueva ruralidad, a valorar más el trabajo de los campesinos y su contribución al desarrollo de la ciudad, a repensar los territorios rurales, porque los corregimientos también son Medellín” afirma el Gerente de Corregimientos, Andrés Felipe López.

Con 36 marquesinas y 4 invernaderos renovados, la Alcaldía de Medellín sigue impulsando el campo y su producción. Las personas interesadas en inscribirse a la base de datos, para aplicar a todos los programas de desarrollo económico y rural, pueden comunicarse a la línea 604 385 55 55 ext. 2839.