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Hay ciertos municipios antioqueños que tienen una sacralidad indiscutible para los creyentes de la Virgen del Carmen, como lo son San Pedro de los Milagros y Entrerríos. Desde Medellín, hay una ruta que sale de la Terminal del Norte hacia estos destinos. A eso de las tres de la tarde, un camino que siempre dirige desde el timón, Carlos Correa. Este es el trayecto que conduce del trabajo a su hogar, mientras, con devoción, aprovecha para llevar una ofrenda a la Virgen cada vez que tiene la oportunidad.
Carlos es conductor de bus desde hace 34 años. Trabajaba desde muy pequeño. Comenzó en el campo, junto a sus hermanos, sembrando y cosechando papa. En San Pedro de los Milagros, a sus 20 años, empezó como aseador de bus. “Gracias a que era amigo de muchos conductores, ellos me enseñaron a manejar, a transportar las personas y a cuidar los vehículos”, y debido a eso, llegó a desarrollar esta gran labor que ejerce desde la Terminal del Norte de Medellín y que “puede ser peligrosa, pero se hace con mucho amor”, expresa Carlos.

En el vehículo que transporta tiene una estampita de la Virgen, a la que siempre se encomienda, con una oración, antes de iniciar cada viaje. Aunque lleva más de tres décadas como conductor en la empresa Expreso Belmira, no lo conocen por su nombre, sino por su apodo: le dicen “El Padre”; esto puede ser porque siempre tiene una expresión de agradecimiento a Dios o unas palabras de consuelo para quien lo necesite, mencionando a la Virgen o solamente porque su fe es tan fuerte que lo reconocen a kilómetros. Pero, el motivo real es “porque lideraba un grupo de oración y me reunía en mi casa con las personas que hacían parte de él. Entonces la gente creía que era un cura. De igual forma, siempre he invitado a la gente a la oración y a la fe, porque cuando se tiene esto, uno puede sentir a Dios”, asegura Carlos.

Si bien, siempre fue muy devoto de Dios y de la Virgen, uno de los mayores milagros que cree que se la ha presentado en su vida, es cuando su esposa, Cecilia, a pesar de siempre llevar una vida sana y verse saludable, un día tuvo un fuerte dolor de cabeza, y cuando fue al médico, le diagnosticaron un aneurisma en el cerebro.
Carlos aparta la mirada cuando cuenta esa historia, invadido por la nostalgia. Cecilia quedó inconsciente durante unos días, viviendo por la tecnología de la clínica: “Los médicos decían que no había nada por hacer, que era mejor desconectarla”, pero Carlos no perdía la fe. Justamente, al día siguiente que los médicos dieran ese dictamen, Cecilia se levantó, completamente consciente, sin ninguna afectación cognitiva. “Los médicos quedaron asustados, me decían que, entre mil personas, una podría levantarse de esa manera. Para mí, eso fue un milagro.”, cuenta Carlos.
Ahora, Cecilia se encuentra bien de salud, aunque el aneurisma le dejó algunas secuelas físicas, su vida, es lo que su familia más valora en este momento y lo que más agradecen es a Dios y a la Virgen.
En el hogar de «El Padre” hay una Virgen con un metro de alto, acompañada de un cristo que es la réplica exacta de el de la iglesia de San Pedro de los Milagros. También están algunos santos y en la mitad de la pared, se encuentra una foto del Corazón de Jesús. En este gran altar que tienen en su casa, es donde depositan las ofrendas y oraciones de toda la familia.

“Cada día, me encomiendo mucho a la Virgen, creo que es como un ángel protector, que destruye todo lo malo que se pueda tener alrededor”. Cecilia también ora junto a Carlos a diario, y cada mañana, espera en el balcón de su casa, el pito de un bus que presiona su esposo todos los días, para indicarle que ya va conduciendo la ruta Entrerríos – Medellín.
Además, este trayecto lo hace desde que comenzó su camino en Expreso Belmira, donde se ha destacado por nunca llevar “afanes”, maneja con tranquilidad y siempre cumple sus tiempos en la vía. Incluso, muchos pasajeros que usan esa ruta frecuentemente esperan a que les toque con “el padre”, porque se sienten seguros en su recorrido cuando él va al frente del timón.
Sin duda, otro milagro que considera importante, es que en los más de 30 años que lleva conduciendo bus, nunca le ha pasado nada. Por eso, cuando llegan las fiestas del 16 de julio, las celebra con mucho fervor. “Lo hago con mucho amor y mucho respeto. Creo que la Virgen del Carmen es un ser muy importante en la eternidad. Sé que muchos no creen y sé que no podemos verla, pero en la eternidad nos encontraremos con ella, porque es la que intercede por nosotros con el padre Dios”, expresa Carlos.
Desde ya, prepara más ofrendas para la Virgen que lleva la Iglesia Nuestra Señora de los Dolores. Cuando llega de la ruta Medellín – Entrerríos, prepara un ramo de flores de margaritas de varios colores, entre blanco, rosado y amarillo, junto a un pedazo de pan y una vela blanca. Así encomienda su salud, sus trayectos, su protección, su vida y la de su familia.
Sube los escalones que llevan a la entrada de la iglesia, se persigna y se deja llevar por el blanco, casi infinito, que se encuentra al interior, junto a luces tenues doradas. Pasando los altos arcos del techo de la iglesia, finaliza su recorrido llegando al altar de la Virgen, donde terminará con una oración, e iniciará nuevamente su camino con la bendición de la Patrona de los Conductores.

Además de su fe inquebrantable, al igual que Carlos, conductores y empleados de las Terminales de Transporte de Medellín se preparan para asumir con compromiso y respeto los retos que impone esta temporada de fin de año, en donde miles de viajeros salen a recorrer distintas rutas y caminos y llegan a nuestra ciudad en búsqueda de nuevos caminos y sensaciones, muchos de ellos retronando a sus hogares para celebrar con su familia y sus seres queridos esta temporada decembrina.
Por eso, para que los turistas y la ciudadanía en general vivan una temporada navideña responsable y segura, la Alcaldía de Medellín, por intermedio de las secretarías de Turismo y Entretenimiento y de Seguridad y Convivencia, desarrollará una serie de acciones enfocadas en la prevención y la sensibilización en puntos estratégicos de la ciudad.
Como parte de estas, desde el 5 de diciembre habrá un stand en la zona de Parques del Río para informar y promocionar los atractivos turísticos de Medellín y sensibilizar a los visitantes de los alumbrados y a quienes lleguen a nuestra ciudad sobre buenas prácticas de turismo responsable y sostenible.
El 5 y el15 de diciembre, los turistas que lleguen a la ciudad serán recibidos en los aeropuertos y en las terminales de transporte de Medellín con música y mensajes sobre seguridad turística, autocuidado y rutas de atención disponibles en caso de presentarse alguna situación durante su estadía.

Las caravanas estarán acompañas de música, personajes navideños y mensajes pedagógicos sobre cultura turística, prevención de la Explotación Sexual Comercial de Niñas, Niños y Adolescentes -ESCNNA- y otros delitos asociados a viajes y turismo.

Con estas iniciativas la Alcaldía de Medellín, reafirma su compromiso por un turismo protector de la vida, los derechos y la experiencia de quienes viven en nuestra capital y de quienes llegan a la ciudad durante esta temporada de vacaciones, para lo que es vital el buen servicio y la orientación adecuada que se brinde a nuestros visitantes por parte de los empleados de nuestros aeropuertos y de las terminales de transporte y de conductores que, como Carlos, transportan a centenares de personas durante estas épocas por las carreteras de Antioquia apegado a su fe y sintiéndose protegido siempre por la Virgen del Carmen, Patrona de los Conductores.