Alcaldía
Contenido asociado a:
Se trata de recorridos, puerta a puerta, preparando a las comunidades para enfrentar la temporada de precipitaciones. Las familias, en zonas de riesgo, reciben acompañam...
Con la llegada de la segunda temporada de lluvias, la Alcaldía de Medellín, a través del equipo psicosocial del componente Construye Bien, intensificó los recorridos de sensibilización en quebradas. La decisión se tomó tras la temporada invernal más fuerte del año, ocurrida entre abril y mayo, que dejó afectaciones en varios puntos críticos y encendió las alertas sobre la necesidad de fortalecer las acciones preventivas. En total, estas intervenciones han permitido sensibilizar a 163 personas en lo corrido de 2025.

Estas actividades buscan que la comunidad, especialmente quienes habitan en las laderas o cerca de las quebradas, reconozcan los riesgos de permanecer en zonas de alta vulnerabilidad y, en caso de una emergencia, sepan cómo actuar de manera segura y oportuna, priorizando la evacuación y el cuidado de la vida.
«En Medellín, la prioridad es cuidar la vida, por eso, hemos intensificado los recorridos de sensibilización en las laderas y quebradas de la ciudad. Estamos preparando a las familias para enfrentar la segunda temporada de lluvias, que inicia este mes y se extenderá hasta diciembre. En este periodo aumenta la probabilidad de crecientes súbitas e inundaciones y es fundamental que la comunidad reconozca los riesgos, sepa cómo evacuar y, sobre todo, informe de inmediato a las autoridades competentes cualquier señal de alerta”, expresó el subsecretario de Control Urbanístico, Carlos Trujillo.

Desde mayo y hasta la fecha se han realizado recorridos pedagógicos en quebradas como La Llorona, Cañada Negra, La Iguaná, La Hueso, La Limona, Care Vieja – La Rosa, La Picacha y La Guayabala, además de acciones en el sector de Buenavista.
El equipo psicosocial de Construye Bien desarrolla este trabajo mediante recorridos puerta a puerta, en los que conversa directamente con las familias, explica los riesgos asociados a la temporada de lluvias y entrega recomendaciones sencillas para proteger la vida. Con esta estrategia cercana, se busca que cada hogar entienda la importancia de la prevención y se sienta acompañado por la institucionalidad.

Durante las actividades se insiste en la necesidad de no arrojar basuras ni escombros a las quebradas, ya que estas prácticas agravan las inundaciones y generan represamientos que pueden desencadenar emergencias mayores. Asimismo, se recuerda que estas zonas no son aptas para construir viviendas, pues habitar en laderas o rondas hídricas (las orillas de los ríos y quebradas que deben quedar libres para que el agua pueda correr sin peligro) expone a las familias a riesgos permanentes.