45 estudiantes con discapacidad se forman para consolidar a Medellín como Valle del Software

.: Ellos se preparan en áreas como Ingeniería Biomédica y Sistemas Mecatrónicos, entre otras.
.: Hacen parte de un grupo de 97 discapacitados quienes están inscritos en 25 programas dictados por las tres instituciones de educación superior adscritas al Municipio de Medellín.
.: Entre los beneficiados, 14 cuentan con becas y acceso a fondos a través de Sapiencia. 

Un grupo de 45 alumnos con discapacidad se forman para consolidar a Medellín como Valle del Software. Ellos están inscritos en dos de las tres instituciones de educación superior adscritas a la Administración Municipal y se preparan en áreas como Sistemas Mecatrónicas, Tecnología en Desarrollo de Software, Ingeniería Biomédica, Ingeniería Mecatrónica o Tecnología en sistemas de información, entre otros. 

Estas temáticas no solo apuntan al propósito de ser un Valle del Software, sino que se incorporan a la Cuarta Revolución Industrial. 

Cristian Granada, egresado en Desarrollo de Software, dijo que “la universidad  es un ambiente muy diferente, en donde se nos facilita tener el servicio de interpretación y personas de apoyo que son profesionales y que nos acompañan en el proceso”. 

Estos 45 jóvenes hacen parte de un total de 97 discapacitados que estudian en la Institución Universitaria Colegio Mayor de Antioquia, Instituto Tecnológico Metropolitano – ITM y la Institución Universitaria Pascual Bravo, las cuales en articulación con Sapiencia trabajan para garantizar atención con calidad a la población diversa e incluyente de la ciudad. Todos ellos están inscritos en un total de 25 programas. Sus diagnósticos van desde sordera, baja visión o ceguera, autismo y esquizofrenia hasta movilidad reducida o discapacidad cognitiva, entre otras. 

De los 97 alumnos de educación diversa e incluyente, 14 cuentan con beneficios otorgados por Sapiencia a través de becas y acceso a fondos. 

Para acompañar el proceso, en el ITM hay siete intérpretes y cuatro expertos que imparten el español como segunda lengua; además se tiene el primer diccionario de neologismos académicos en Colombia con más de 200 palabras en lengua de señas que se aplican en los programas en los que estudian personas discapacitadas. 

Adicionalmente, se trabaja para mejorar la accesibilidad a las instituciones por medio de adecuaciones a la infraestructura física como rampas, alarmas en los baños y porterías especiales, entre otros.