Los Escuchaderos llegan a las universidades de Medellín para acompañar emocionalmente a los estudiantes

Hablar y ser escuchado, a veces, es el primer paso para sentirse mejor. Con esta idea, los Escuchaderos -que son espacios gratuitos de acompañamiento emocional impulsados por la Alcaldía de Medellín- han llegado a diferentes universidades de la ciudad, convirtiéndose en un recurso cercano y oportuno para que los jóvenes enfrenten con mayor seguridad sus retos académicos, personales y familiares.

En estos Escuchaderos, profesionales debidamente capacitados abren un espacio de conversación, sin juicios, donde lo más importante es que cada estudiante pueda expresar lo que siente. La iniciativa busca promover el bienestar emocional y la salud mental, dos temas cada vez más relevantes en la vida universitaria.

La primera vez da miedo

Para muchos, acercarse por primera vez fue un reto. “Al principio me daba miedo, pensaba que tal vez mis problemas no eran tan graves como para ir. Pero un día decidí intentarlo y me encontré con alguien que simplemente me escuchó. Eso hizo toda la diferencia, porque pude hablar sin sentirme juzgada”, cuenta Laura Nuñez Henao, estudiante de Comunicación Social de la Universidad de Antioquia.

Historias como la de Laura se repiten en distintos campus. Los Escuchaderos han permitido que los jóvenes comprendan que pedir ayuda no es una debilidad, sino un acto de autocuidado. Según el equipo de la estrategia, lo fundamental es que los estudiantes sientan que no están solos, que siempre habrá alguien dispuesto a acompañarlos, escucharlos y dentro de sus posibilidades ayudarlos.

“La U a veces es estresante”

La presión de los exámenes, la carga de trabajos y los problemas personales muchas veces se acumulan en silencio. Sin embargo, cada conversación en los Escuchaderos abre la posibilidad de transformar esas cargas en aprendizajes y encontrar alternativas más saludables para enfrentarlas.

“Yo llegué en un momento en que me sentía muy abrumado. Tenía dificultades económicas y eso estaba afectando mis estudios. Hablar en el Escuchadero me ayudó a poner mis ideas en orden y a darme cuenta de que sí tenía opciones. Ahora siento más tranquilidad y he mejorado incluso en mi rendimiento académico”, relata Mateo Molina, estudiante de Ingeniería de la Universidad Nacional.

La estrategia

Con estas experiencias, los Escuchaderos no solo se consolidan como un servicio de apoyo, sino como una apuesta por la construcción de entornos universitarios más empáticos y humanos. Cada palabra compartida, cada silencio acompañado y cada historia escuchada son una oportunidad para recordar que el bienestar emocional importa tanto como el académico.

Esta estrategia, liderada por la Secretaría de Salud de Medellín, tiene como meta llegar a más de 50 universidades de la ciudad en este 2025 y cuenta con profesionales de salud mental, que atenderán al público de lunes a viernes de 9:00 a. m. a 4:00 p. m., y los sábados de 9:00 a. m. a 2:00 p .m., lo que permite a los estudiantes acercarse a estos espacios sin necesidad de agendar una cita y sin costo alguno.

El programa también ofrece acompañamiento a parejas, familias y grupos poblacionales como la comunidad LGTBIQ+ y las comunidades indígenas.

Por eso la invitación es muy clara, si en algún momento sientes que necesitas hablar no dudes en acercarte a un Escuchadero, donde encontrarás un espacio seguro, cálido, gratuito y el acompañamiento de alguien que estará listo para escucharte, porque cuidar de la mente y del corazón también hace parte de construir una Medellín más fuerte, solidaria y con más oportunidades para todos.