Indicadores de maltrato infantil
Victoria Eusse Bernal. Médica cirujana. Pediatra con subespecialización en niños con énfasis en trastornos cognitivo comportamentales y neuropsicología
A continuación se presentan algunos indicios asociados comúnmente a ciertos tipos de negligencia y abuso, como el abuso físico, el abuso sexual o el abuso emocional.
Es importante subrayar que estos tipos de abuso por lo común se manifiestan en combinación y no aisladamente; es decir, un niño que es abusado físicamente, a menudo también es víctima de otros tipos de abuso, como el emocional o el psicológico, o un niño abusado sexualmente también puede ser víctima de la negligencia o el abandono. Estos indicios son:
El niño
- Demuestra cambios repentinos en su comportamiento y en su desempeño escolar.
- Tiene problemas de aprendizaje que no pueden ser atribuidos a una causa física o psicológica específica; se concentra con dificultad.
- Siempre está alerta, como si algo malo le pudiera ocurrir.
- Carece de supervisión adulta.
- Es extremadamente retraído, pasivo o sumiso.
- Llega temprano a la escuela y a otras actividades, se queda hasta tarde y no quiere regresar a su casa.
El padre (o la madre)
- Demuestra poco interés por el niño.
- Ha sido notificado de los problemas físicos o médicos del niño, pero éste no ha recibido tratamiento.
- Niega la existencia de los problemas del niño en casa o en la escuela, o culpa al niño por estas dificultades.
- Pide a los maestros o cuidadores que utilicen fuerza física severa como método de disciplina si el niño se porta mal.
- Piensa que el niño es por naturaleza malo, problemático o que vale poco. Exige resultados físicos o académicos que el niño no puede alcanzar.
- Muestra cierta dependencia afectiva con el niño; lo necesita para satisfacer sus necesidades emocionales; exige toda su atención.
El padre (o la madre) y el niño
- Raramente se tocan o se miran a la cara.
- Consideran que su relación es completamente negativa.
- Dicen no caerse bien.
a) Indicios de abuso físico
- Hay que considerar la posibilidad de abuso físico cuando el niño:
- Tiene lesiones, quemaduras, mordidas, ojos amoratados o huesos dislocados o rotos.
- Tiene moretones, machucones u otras marcas en la piel después de haber faltado al colegio.
- Parece estar aterrorizado de sus padres y llora o protesta cuando es hora de irse a su casa.
- Se encoge o se disminuye cuando un adulto se le acerca.
- Dice que ha sido lastimado por uno de sus padres o por un cuidador.
Hay que considerar la posibilidad de abuso físico cuando el padre, la madre u otro cuidador adulto:
- Da una versión contradictoria o poco convincente, o cuando no puede explicar las lesiones del niño.
- Dice que el niño es “malo”, o lo describe de manera muy negativa.
- Recurre a la fuerza física severa para disciplinar al niño.
- Fue abusado durante su infancia.
b) Indicios de abandono o descuido
- Hay que considerar la posibilidad de negligencia o abandono cuando el niño:
- Falta a la escuela con frecuencia.
- Anda mendigando para que le den comida o dinero, o los roba.
- Carece de atención médica o dental, no tiene inmunizaciones o lentes (si los necesita).
- Con frecuencia está sucio y huele mal.
- No tiene ropa suficiente para protegerse del clima.
- Abusa del alcohol y las drogas.
- Dice que no hay nadie en casa que lo pueda cuidar o atender.
Hay que considerar la posibilidad de abandono o negligencia cuando el padre, la madre u otro cuidador adulto:
- Se muestra indiferente hacia el niño y sus necesidades.
- Parece estar deprimido o sin motivación.
- Se comporta de manera irracional.
- Abusa del alcohol y las drogas.
c) Indicios de abuso sexual
Hay que considerar la posibilidad de abuso sexual cuando el niño:
- Tiene dificultades para caminar o para sentarse.
- De pronto se niega a participar en actividades deportivas o a cambiarse de ropa en el gimnasio.
- Dice que tiene pesadillas y que se orina en la cama.
- De pronto le cambia el apetito, no come bien.
- Demuestra conocimientos sobre la sexualidad que parecen muy sofisticados, inusuales o hasta raros para su edad.
- Hay un embarazo o contrae una enfermedad de transmisión sexual, particularmente si tiene menos de catorce años.
- Se escapa de su casa.
- Dice que fue abusado sexualmente por uno de sus padres o por un cuidador adulto.
Hay que considerar la posibilidad de abuso sexual cuando el padre, la madre u otro cuidador adulto:
- Sobreprotege al niño o limita severamente su contacto con otros niños, especialmente los del sexo opuesto.
- Se recluye y es dado al misterio.
- Es celoso y controla a otros miembros de la familia.
d) Indicios del maltrato emocional
Hay que considerar la posibilidad de maltrato emocional cuando el niño:
- Demuestra comportamientos extremos, que van de la sumisión al comportamiento intempestivo, de la pasividad a la agresión.
- Se comporta como adulto (por ejemplo, cuidando a otros niños), o demuestra cierto infantilismo (golpeándose la cabeza o meciéndose).
- Hay retardo en su desarrollo físico o emocional.
- Ha intentado suicidarse.
- Dice que no tiene un vínculo afectivo con sus padres.
Hay que considerar la posibilidad de maltrato emocional cuando el padre, la madre u otro cuidador adulto:
- Acusa, desprecia o humilla al niño constantemente.
- No demuestra ningún interés por el niño y se niega a aceptar ayuda para los problemas del niño.
- Rechaza al niño abiertamente.