Fútbol y arte, dos herramientas de transformación para los jóvenes del Sistema de Responsabilidad Penal

Todos y todas merecemos nuevas oportunidades, tener la posibilidad de ser conscientes de nuestros errores y aprender de ellos para resignificarlos. Ese es el propósito del proyecto de Justicia Juvenil Restaurativa, una apuesta por los jóvenes infractores de la ciudad que lleva dos años adelantando acciones que son motor de cambio y resiliencia para los adolescentes del Sistema de Responsabilidad Penal que han cometido delitos.

Varias de esas acciones están orientadas al fortalecimiento de habilidades a través del arte y el deporte, por eso, el primer torneo de Fútbol por la Vida y por la Paz, realizado en los centros de internamiento para adolescentes, llevó una programación musical, cultural y deportiva que benefició a 150 jóvenes de los centros Carlos Lleras Restrepo y La Acogida.

En el torneo se hicieron ocho partidos de eliminación directa con participación de 57 jugadores, quienes armaron equipos nombrados por ellos mismos basados en las habilidades que consideran deben reforzar para cambiar sus vidas: así nacieron el equipo del respeto, el de la solidaridad, otro que se llamó la unidad, también se formó el team de la confianza, entre otros.

El secretario de la No-Violencia, Luis Eduardo Giraldo Lopera, destacó la importancia esta estrategia para los adolescentes y del enfoque de la justicia restaurativa en la transformación de los jóvenes con conductas de riesgo.

“La intención de incluir los enfoques de No-Violencia y justicia restaurativa implica la creación de nuevas estrategias para atender y trabajar con nuestros grupos poblacionales. Hemos querido incluir el arte, la cultura y el deporte como estrategias fundamentales para las segundas oportunidades y para la transformación de la vida de los adolescentes que hacen parte del sistema”, agregó el secretario.

Esta iniciativa, que también es liderada por el Despacho de la Gestora Social de Medellín, incluyó, además del torneo de fútbol, varias presentaciones de música urbana, a cargo de los artistas Rubinsky Rbk y Chris Muñoz, quienes promovieron la reflexión alrededor de la fe y las segundas oportunidades.

Jóvenes del Sistema de Responsabilidad Penal. Foto Alcaldía de Medellín

Por su parte, Robinson Posada, El Parcero del Popular # 8, quien ha dirigido algunas de las estrategias artísticas desde el teatro y la música destacó la necesidad de estas iniciativas. “Pienso que el arte tiene esa herramienta para transformar y convidar, generar esos procesos de paz, de resocialización, de resignificación y de resiliencia desde la palabra. Y en este momento, desde el fútbol como el deporte que nos invita a encontrarnos desde la paz”, agregó.

Desde hace dos años, la Administración Distrital desarrolla estos planes orientados al deporte con reincorporados, víctimas y reintegrados. Música por la Vida se ha posicionado en los centros de internamiento preventivo desde el Despacho de la Gestora Social y ha permitido proyecciones de películas, documentales y formación alrededor del cine y el teatro.

Además de estos encuentros, los jóvenes han recibido brigadas de salud, planificación familiar, jornadas de salud menstrual, yogatón, Escuelas de la No-Violencia, el programa «Parceros», artes marciales, capacitación en cuarta revolución y talleres de artes y oficios.

Toda esta oferta institucional busca que los jóvenes recuperen el valor y la dignidad por sí mismos ofreciéndoles herramientas que transformen  sus conductas de riesgo y que estimulen sus habilidades para la sana convivencia y para reconocer el daño causado.