La Fiesta del Libro y la Cultura de Medellín 2021: una quinceañera que nos reactiva la esperanza

La Fiesta del Libro y la Cultura de Medellín llega a sus 15 años y regresa de manera presencial, para celebrar con los suyos y sus más cercanos cómplices, el reencuentro y la alegría de brindarnos lo mejor de su esencia a través de las palabras y los escritos.

La celebración es para una quinceañera. El escenario es el Jardín Botánico, ese bello espacio de la ciudad ubicado en el sector de Carabobo Norte. La gente al principio va entrando, “graneadita” como decimos aquí, pero luego aumenta su flujo. Todo está preparado -incluyendo a los anfitriones- para tener durante estos diez días el mejor de los festejos.

Es una conmemoración especial y diferente. No se bailará el tradicional vals. Ni habrá mariachis, ni trajes encopetados, ni cachacos, ni charoles, ni licor, ni meseros, ni un bufete con los más exquisitos platos esperando por los comensales, pero eso sí, el Jardín está listo con sus mejores galas para recibir a todos con los brazos abiertos.

Desde el primer día y hasta el último de los diez que dura la Fiesta, la gente camina presurosa de aquí para allá.  Hombres, mujeres, niños, adultos y jóvenes, enfundados en camisetas, camisas, faldas y pantalones de todos los colores y estilos recorren de arriba abajo la extensión del lugar, buscando y hurgando hasta encontrar lo que les gusta.

Parejas de enamorados caminan cogidos de la mano, susurrando recuerdos memorables y futuros posibles. ¿Qué se dirán al oído? Los niños corretean felices y sus padres no les pierden de vista. Los fotógrafos enfilan sus cámaras y los camarógrafos apuntalan sus trípodes para hacer la mejor toma. La Fiesta está empezando y nadie se quiere perder detalle. Colegialas con sus uniformes de faldas a cuadros, acompañadas de sus compañeros de colegio, corretean por todos lados. Los grupos de chicos universitarios también dicen “aquí estamos”.

Los amigos estrechan el puño y “el parce” de saludo se oye a menudo. Todos pasan, incluyendo los que usan el último alarido de la moda, pero los tenis, los morrales, los jeans y los tapabocas de todo tipo, son los reyes del vestuario.  Pasa gente de todas las edades, estilos y colores, en su mayoría jóvenes, al, igual que gente diversa con gustos y estilos más variados todavía: los tatuados, los que usan piercings, los altos, los bajos, los peludos, los calvos, los más adultos y los de mediana edad. Pasan todos de un lado para otro. Pareciera que nadie se quiere perder la Fiesta.

Están los que no sueltan el celular y a todo le toman foto; pasa una chica tomando un jugo, se topa con un joven tomando café y se cruzan sus miradas. ¿Amor a primera vista?

Las parejas de enamorados se leen ensimismados poemas de un libro de Benedetti recién comprado.

Todos tienen algo que decir. Unos prefieren a Steinbeck.  Otros dicen que Gabo es el mejor.  a señora pide la Divina Comedia. Los de más allá escogen El Principito. Un padre solitario lee a su pequeña hija un cuento de los hermanos Grimm y cuando nadie lo espera, la irreverente Mafalda de Quino hace su aparición y el abuelo se queda con Víctor Hugo.  Los textos de poesía alzan su voz, para recordar que allí están. Los libros de todos los géneros, grandes y pequeños, ubicados en sus estantes bailan de alegría porque llegó su momento y sienten sobre sus lomos, carátulas y páginas, las miradas de la audiencia a la cual le hacen el mejor de los guiños, seduciendo a quienes se deciden por ellos. 

Es que aquí, los rostros adustos y preocupados de hace unos meses, se van transformando de a poco en semblantes sonrientes, llenos de esperanza.  Volvieron los abrazos estrechos de la familia y los amigos; los besos furtivos de los enamorados, las miradas cómplices y las lágrimas de alegría de unos y otros por el reencuentro reprimido por tantos meses de aislamiento. La Fiesta tan anhelada nos congrega e inyecta una nueva vacuna, la de energía positiva a los asistentes.

Es la gran Fiesta del Libro y la Cultura Medellín 2021 que cada año -pero en este como ningún otro- narra su propia historia; es la rumba de las letras y las palabras, de los poemas y de las conversaciones, que nos devuelve el calor perdido y nos abraza con sus contenidos.

Son 15 años de una Fiesta llena de anécdotas y experiencias, que ni la pandemia podrá silenciar. Es una celebración que siembra letras y produce sonrisas. Es un homenaje a la vida. Es el momento de las palabras. Es el máximo evento de Medellín donde ellas son las reinas.

La quinceañera

Hasta el 3 de octubre el Jardín Botánico de la ciudad -con sus 13,2 hectáreas de extensión- acogerá a los visitantes que quieran disfrutar de la celebración más lúdica que tiene nuestra capital: La Feria del Libro y la Cultura, que llega a su edición número 15.

Allí la palabra, el poema y la prosa se funden en un interminable abrazo. Son 130 librerías entre grandes, medianas y pequeñas; unas más reconocidas, otras no tanto; que estarán en este pulmón verde de la ciudad ofreciendo a la concurrencia relatos, historias y cuentos, para acariciarnos con las palabras: esas que siempre nos llenan el alma.

Es la cultura la que -por medio de esta Fiesta- le da un respiro a la ciudad y la reactiva y ofrece la oportunidad de seguir avanzando hacia la conquista de nuevos retos, para que Medellín y sus gentes sigan transformando su vida y puedan trasegar por senderos menos espinosos.

La Fiesta del Libro y la Cultura de Medellín 2021 está de plácemes de nuevo, porque puede volver a celebrar con los suyos y sus más cercanos cómplices la alegría de brindarnos lo mejor de su esencia, a través de una experiencia escrita por grandes genios de la literatura, que nos permiten tener un halo de esperanza y ver la vida con ojos más soñadores.