Leidy Marín: Entre Calles y Sueños, la Vida de una Agente de Tránsito con Pasión

En medio del bullicio de la ciudad, entre pitos y luces intermitentes, se encuentra Leidy Marín, una agente de tránsito cuya historia inicia en el municipio del Peñol y transcurre diariamente en las vías de Medellín, donde se desempeña como Agente de Tránsito.

«Mi historia comenzó a escribirse a los 14 años, cuando fui mamá», comparte Leidy con una mezcla de nostalgia y fortaleza en su voz. A pesar de los obstáculos de ser madre adolescente, enfrentó la vida con madurez, convirtiendo cada desafío en una oportunidad para crecer. «Eso fue lo que me hizo fuerte y berraca para muchas cosas», confiesa con orgullo.

Después de varios años trabajando como administradora en tiendas de ropa en centros comerciales, Leidy decidió cambiar el rumbo de su vida y seguir su vocación: Ser Agente de Tránsito. Ahora que siente que ha logrado este sueño dice que no es simplemente un trabajo, es una realización personal, una motivación y una vocación que la siguen desde muy pequeña.

Su rostro ilumina cuando habla de su labor diaria. «Me encanta salir a servirle a la gente, ayudar a todas las personas que necesiten una mano amiga». Leidy no solo dirige el tráfico, sino que también es una voz amable que brinda apoyo a aquellos que lo necesitan.

Su pasión no termina con el día a día de ser Agente de Tránsito, Leidy aspira a implementar iniciativas educativas en colegios sobre seguridad vial. Su compromiso no se limita a regular comportamientos indebidos o infracciones; se extiende hacia el futuro, buscando construir un entorno más seguro y consciente.

«Mi motivación diaria es mi hija y mi crecimiento personal en el trabajo». Cada día es un reto nuevo en la ciudad, donde las situaciones que experimenta desde su labor de Agente,  la hacen reflexionar sobre la fragilidad de la vida. «Somos acelerados, no cuidamos nuestra vida como deberíamos, hay pocas cosas a las que les damos el valor que merecen, la vida es una de ellas».

Leidy ha evolucionado en su papel como Agente de Tránsito, creciendo en educación, criterio y seguridad, asegura que la labor de Agente le ha ayudado a pulirse más como persona en diferentes aspectos. Su historia es un recordatorio de que detrás del uniforme hay un ser humano lleno de sueños, que día a día se esfuerza por hacer de las vías un lugar mejor.