Una argentina deslumbró en la fiesta tanguera de la ciudad

.: Malén María Panichelli se llevó el primer lugar en el concurso de canto del Festival Internacional de Tango de Medellín.

Cantante, bailarina y actriz, Malén María Panichelli, tiene 31 años y es de Córdoba, Argentina. Aunque su país es la meca del tango, a ella poco le interesaba vincularse con este género que despierta emoción en sus compatriotas. Cursó 7 semestres de medicina, carrera que, empezando el octavo semestre, decidió abandonar para dedicarse de lleno a la danza.

“Mi primer encuentro con el tango fue cuando apenas empezaba a cantar (a los 24 años), en 2014. Mi abuelito quería que le cantara un tango para su cumpleaños, pero yo no quería, porque en ese momento no me gustaba. Pero bueno, finalmente le preparé Garganta con Arena”.

Un mes y medio después de haberle concedido el deseo de cumpleaños a su abuelo, él falleció. “Luego de eso, no volví a cantar tango. Fue recién, en el 2019, que yo llegaba a Colombia, que empecé a cantarlo porque en la compañía Tango Vivo, querían que lo hiciera”.

Y fue esa canción con la que homenajeó a su abuelo, de Cacho Castañeda, la que interpretó en el Festival Internacional de Tango de Medellín y la que la llevó a ganarse el primer puesto en el concurso de canto.

Actualmente vive en Cali y en la sucursal del cielo se dedica a realizar espectáculos en la compañía Salsa Viva y Tango Vivo Cali. Llegó a la ciudad por su mejor amiga quien le dijo que allí necesitaban a alguien de su perfil profesional. Estaba entre México y Colombia y se decidió por Colombia. 

“Allí me dedico a hacer espectáculos de todos los estilos: musicales infantiles, musicales, revistas tipo Las Vegas, shoes de salsa o tango, y también escribo guiones”, afirma.

Su esposo, un barranquillero, quien también es tanguero, al saber que ella había resultado seleccionada para participar del concurso fue claro: “O volvés con el primer premio o no te abro la puerta de la casa”, dice entre risas. Cosa que ya no le preocupa porque seguro la recibirá orgulloso y con los brazos abiertos para celebrar este reconocimiento.

“Yo soy una persona que sabe cantar, que lo hace bien, pero me cuesta mucho creer en mí. ¡Este premio me ha hecho abrir los ojos! Me ha tocado la espalda y me ha dicho, niña, confíe y crea en usted ¿oyó?”, manifiesta.

Seguir a su corazón y dejar su talento en cada escenario que pisa, se afianzó aún más con este galardón, que le demostró que el camino que eligió hace unos años era el correcto.