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Especies al borde de la desaparición

25 especies al borde de la desaparición: una introducción urgente

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Por: Alcaldía de Medellín - Digital |

La pérdida de biodiversidad es uno de los problemas ambientales que más ocupa atención, debido a que de esto depende la supervivencia de muchos ecosistemas naturales. ...

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  • La pérdida de biodiversidad es uno de los problemas ambientales que más ocupa atención, debido a que de esto depende la supervivencia de muchos ecosistemas naturales. Los datos más exactos sobre esta realidad en las diferentes regiones del país están en la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.

    Según sus datos, hay alrededor de 2500 especies en peligro de extinción, la mayoría variantes de una especie raíz. 25 especies al borde de la desaparición son:

    1. Oso polar

    2. Zorro ártico

    3. Halcón peregrino ártico

    4. Bisonte

    5. Caribú

    6. Narval

    7. Buey almizclero

    8. Ballena Beluga

    9. Morsa del Pacífico

    1o. Lince ibérico

    11. Oso pardo

    12. Urogallo cantábrico

    13. Tortuga mora

    14. Águila imperial ibérica

    15. Cigüeña negra

    16. Lagarto gigante del Hierro

    17. Ballena Vasca

    18. Tritón de Montseny

    19. Visón europeo

    20. El Urogallo

    21. El Atún rojo

    22. Cangrejo de Río Europeo

    23. Ajolote

    24. El Lemur

    25. El Panda Rojo

    Impacto humano: la principal causa de la amenaza para estas especies

    Existen diferentes factores que desencadenan en la desaparición de algunas especies. No obstante, la influencia negativa de las actividades humanas posee un lugar preponderante en cualquier lista de factores de impacto ambiental.

    La naturaleza suele realizar su propia purga, los animales que no logran adaptarse a los cambios, suelen desaparecer. Pero el impacto humano es causante de la destrucción de los hábitats, la caza furtiva, la sobreexplotación, la contaminación que afecta los ecosistemas terrestres y acuáticos, entre otras acciones.

    La destrucción de ecosistemas naturales es la acción que más arremete contra la biodiversidad. Un claro ejemplo es visible en la situación de los orangutanes blancos, que observan como su territorio va desapareciendo, a la par de sus congéneres.

    Especies al borde de la desaparición

    Los efectos del cambio climático en la supervivencia de estas especies

    El cambio climático es otro factor que influye, acelerando el proceso de desaparición de muchas especies, es el alto precio del desarrollo industrial y la globalización.

    Estamos en presencia de la “sexta extinción masiva” y las olas de calor en tierra y océanos producen la muerte y la migración forzada de muchos animales, lo que altera el equilibrio a corto y largo plazo. El calentamiento trae consigo muchos efectos negativos y produce la degradación de muchos hábitats, lo que resulta invariablemente en la pérdida de la seguridad alimentaria y la protección de muchos animales.

    Hábitats destruidos: la pérdida de hogar para los animales en peligro

    El uso de los recursos naturales abusivo e insostenible ha causado serios   daños en la salud de la tierra, además ha arrasado con especies enteras. La pérdida de la biodiversidad abarca más de un millón de especies, lo que amenaza muchos hábitats. Una quinta parte de la superficie terrestre se encuentra degradada, la tala indiscriminada, la acidificación de los océanos y la contaminación deterioran los espacios de vida de animales y plantas.

    Cazadores furtivos y el tráfico ilegal de especies: una amenaza constante

    El mercado negro de especies exóticas mantiene en jaque a mas de 300 especies que ya están al borde de la desaparición. La Oficina de la Naciones Unidas contra la Droga y el Delito ha reportado que cada año se asesinan 30.000 elefantes, más de 100 tigres y un promedio de 1000 rinocerontes.

    Además, a esto se suman las especies que se venden de un país a otro para ser mascotas exóticas, los cuales terminan muriendo o sufriendo la suerte de convertirse en “reproductores”, cabe resaltar que la mayoría muere por no obtener la alimentación debida, enfermedades frente a las que no pueden defenderse o no poder adaptarse a otras condiciones climáticas.

    En peligro en los océanos: los animales marinos en extinción

    Los animales y plantas marinas se enfrentan a la extinción debido, principalmente a la contaminación producida por industrias extractivas, el cambio climático, el turismo costero masivo, la sobrepesca y la contaminación con plásticos.

    El turismo sostenible se ha defendido como una forma de proteger el ecosistema marino, pero no basta con esta propuesta, ya que son muchos los factores involucrados.

    Hay una gran lista de especies en riesgo de desaparecer, algunas son:

    1. Los hipocampos

    2. Pez luna

    3. Pez espada

    4. Manta gigante

    5. Ballena azul

    6. Tiburón ballena

    7. El dugongo

    8. La tortuga Laud

    9. Tiburón martillo

    10. Nutria marina

    11. Cachalote

    12. Tiburón toro

    13. Frailecillo marino

    14. Tortuga verde

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    Vulnerables en la tierra: especies terrestres en peligro crítico

    Hay muchas especies en riesgo de desaparecer en la corteza terrestre, en Colombia, 1032 especies se encuentran en la lista de amenaza, hay 182 que se consideran en peligro crítico. Algunas de estas especies son:

    El oso andino, por ejemplo, siendo el único oso suramericano tiene un rol fundamental en la dispersión de semillas, estas, se convierten en vegetación que protege los páramos. Se encuentra amenazado por la deforestación, la agricultura extensiva y la cacería furtiva. Otras especies amenazadas son:

    1. Cóndor andino

    2. Jaguar

    3. Caimán negro

    4. Flor de mayo

    5. Manatí del caribe

    6. Delfín rosado

    7. Rana dorada

    8. Tortuga carey

    9. Titi cabeciblanco

    Alarmante disminución de la población: cifras preocupantes

    Según la IUNCN las especies marinas son las que tienen un mayor peligro que enfrentar a corto plazo, se estima que un 35% de las especies de peces están en peligro de extinción, en segundo y tercer lugar, se encuentran mamíferos y anfibios, con 25% de especies en peligro.

    Los reptiles repiten las cifras, ya que se considera que más del 25% de ellos enfrenta el riesgo de desaparecer definitivamente. Las especies de aves tampoco escapan a esta realidad, con un 10% de especies en riesgo.

    A nivel internacional, un estudio que involucra más de 145 expertos y 300 autores reconocidos arroja que el desarrollo económico global de los últimos 50 años, es responsable de que existan más de un millón de especies a punto de extinguirse.

    La Plataforma Intergubernamental de Ciencia Política sobre la Biodiversidad y Servicios del Ecosistema (PBES) señala que de los 8.1 millones de especies desaparecerá alrededor de 1/8 en los próximos 10 años. Según sus cifras, el 40% de los anfibios, casi el 10% de los mamíferos marinos, 10% de los insectos y 33% de los corales están en riesgo.

    Además, señalan que 9% de las razas existentes de mamíferos domesticados, que cumplían funciones en la alimentación y la agricultura han desaparecido definitivamente para el 2016. Estos se reportaron en el Informe de Evaluación Global sobre Biodiversidad y Servicios de Ecosistemas.

    Iconos en peligro: especies icónicas que corren riesgo de desaparecer

    Hay especies icónicas de la naturaleza, o de las regiones climáticas. Lamentablemente muchas de estas especies icónicas están en peligro de extinción y enfrentan condiciones adversas para su subsistencia. Por ejemplo:

    Los pingüinos: emperador y magallánico. De un total de 18 especies, ya 10 están en riesgo de desaparecer. Los magallánicos, de pequeño tamaño, habitan en la Antártida, las Islas Malvinas y en el continente americano. El Emperador, es uno de los más altos, mide aproximadamente 1,3 metros.

    Su posible desaparición se debe al deshielo por el calentamiento global, los derrames de petróleo y el aumento de mercurio en la Antártida. Existen 600.000 ejemplares.

    El Rinoceronte de Java: su hábitat original se encuentra en la Isla de Java en Indonesia y en Sumatra, desde India hasta China. Es una de las especies más amenazadas, las causas de esto provienen del comercio ilegal ya que se le atribuyen poderes curativos a su único cuerno. Existen solo 63 rinocerontes vivos.

    El panda Gigante: es quizá el más icónico cuando hablamos de especies en riesgo. Se popularizó a raíz de una campaña del gobierno chino en los 80. Está en serio riesgo debido a la destrucción de su hábitat y la caza ilegal.  Se reproduce en cautiverio con gran dificultad. Existen 2000 ejemplares.

    Especies endémicas: la importancia de su conservación

    Las especies endémicas se limitan a una zona geográfica en particular. Pueden ser límites políticos, de uno u otro país o regiones geográficas. También se pueden señalar límites ecológicos, como en el caso de especies endémicas de bosques tropicales, por ejemplo.

    La importancia de las especies endémicas radica en su rol dentro de la cadena trófica y el equilibrio ecológico de su hábitat natural. Aunque sus áreas de distribución suelen ser reducidas, muchas se encuentran en riesgo.

    Hay especies endémicas que tienen un papel fundamental para la difusión de semillas, el control de la población de otras especies y tienen un indudable valor biológico que refuerza la importancia de protegerlos a toda costa.

    Programas de reproducción en cautiverio: una esperanza para su supervivencia

    Los programas para reproducir animales en cautiverio han sido siempre una de las primeras acciones que se emprenden frente al riesgo de algunas especies. Generalmente es bastante complicado ya que muchas especies no suelen reproducirse en condiciones artificiales.

    Tal ha sido el caso del Cóndor y el Oso Panda Gigante. Sin embargo, la zoocría se ha enfocado en reproducir muchas de estas especies para asegurar una descendencia sana y fértil.

    En Colombia, algunos de estos programas se han desplegado para la reproducción de babillas y caimanes, iguanas, boas, ranas, mariposas, peces tropicales, escarabajos y serpientes. Todas especies que se encuentran en riesgo debidos a la destrucción de sus hábitats naturales.

    Un punto importante, es la reglamentación, que señala que la contribución con las especies silvestres incluye mantener un número específico de reproductores en cautiverio, los cuales se aseguran eligiendo entre las crías.

    Algunas especies como el Cóndor andino, se han reproducido en cautiverio luego de muchos años de estudio, y cambios en los protocolos, ya que, al principio, los cóndores destruyen sus propios huevos. Hasta la fecha, se han liberado muchos cóndores jóvenes, provenientes de zoológicos de Cali y Estados Unidos ha realizado una hazaña similar con el cóndor californiano.

    Reservas y santuarios: la preservación de los hábitats clave

    Los santuarios y reservas son espacios diseñados para proteger el hábitat de una o varias especies amenazadas. También sirven para proteger formaciones naturales con alto valor científico y paisajístico.

    Hay santuarios marinos, como el santuario de Acandí, en el Choco que abarca alrededor del 30% del territorio colombiano. Además de ofrecer uno de los hábitats protegidos más grande del mundo, protege grandes poblaciones de tortugas marinas del Caribe y Centroamérica.

    Algunos parques nacionales cumplen el rol de reservas y santuarios ya que las legislaciones protegen de la caza y la venta a muchos de sus pobladores tanto animales como vegetales. Algunos son:

    • Parques Nacionales Naturales: Yaigojé Apaporis. Amacayacu. Serranía de los Churumbelos. Río Puré.
    • Reservas Nacionales Naturales: Puinawai, Nukak, La Paya, Cahuinarí

    Especies en peligro y su papel en el equilibrio ecológico

    Los animales juegan un papel muy importante en el equilibrio biológico de los ecosistemas. Desde el más pequeño animal hasta el más grande, todos cumplen una función para preservar el equilibrio ecológico. Hongos, bacterias y lombrices tienen una función en la descomposición de materia, lo que fertiliza los suelos.

    Otros seres vivos, son responsables del equilibrio en las poblaciones de otras especies, incluso algunos restringen la sobrepoblación de especies foráneas o intrusas. Los grandes mamíferos, son responsables del 80% de la biodiversidad funcional en los ecosistemas a nivel global.

    En los ambientes marinos, cada una de las especies en riesgo ha cumplido una misión fundamental por lo que su desaparición acarrea consecuencias para la sobrevivencia de otros animales y plantas. Un ejemplo universal está presente en los corales, cuyos arrecifes protegen la vida de pequeñas especies y aseguran la reproducción y obtención de alimentos de otras.

    La relación entre la conservación de especies y la preservación de ecosistemas

    Como ya hemos expuesto, hay una relación inexorable entre la biodiversidad y la conservación de un ecosistema. El equilibrio de cada ecosistema no depende solo de la cantidad y variedad de las especies y las relaciones, también depende del rol que tiene cada especie en el sostén de este equilibrio.

    Las extinciones predichas por las diversas instituciones relacionadas apuntan a una disminución funcional de 0,3% para los reptiles, y 5% para los peces. Aunque parezcan cifras minúsculas, esto significa que otras especies tendrían que aumentar su funcionalidad. Lo que significa que una sola especie debería asumir más funciones (entre 17% y 23%) incrementando este impacto la desaparición de nuevas especies a largo plazo.

    Especies extintas recientemente: una advertencia para el futuro

    Los motivos principales para la extinción de las especies son el abuso insostenible de recursos naturales, la contaminación y las prácticas humanas irresponsables con el medio ambiente.

    Esto ha arrasado con especies enteras, esta pérdida frenética de la biodiversidad amenaza a un millón de especies, lo que se convierte en una cadena de sucesos que afecta cada vez más a los ecosistemas naturales y por consecuencia a las especies que los habitan.

    No debemos olvidar que la biodiversidad nos permite disfrutar de la seguridad alimentaria, el acceso a los recursos y materias primas necesarias para nuestra propia supervivencia. Además, el equilibrio biológico regula el clima y frena los efectos de la contaminación.

    La Organización de las Naciones Unidas afirma que cada día se extinguen alrededor de 100 especies. Uno de sus informes de 2019 señala que el 25% de animales y plantas se encuentran en riesgo de desaparecer. Y acota que solamente una tercera parte de los países está en camino de alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible.

    El Programa de las Naciones Unidas para el Medioambiente (PNUMA) apunta a la necesidad de conservar el ambiente criando animales en cautiverio, crear nuevas reservas naturales y luchar efectivamente contra el tráfico de animales.

    Especies al borde de la desaparición

    La importancia de la educación y la concienciación en la protección de estas especies

    La educación ambiental y la conciencia son fundamentales para proteger a estas especies. Si bien la extinción suele ser un proceso natural que ya ha ocurrido anteriormente, no puede negarse que la influencia humana  ha acelerado e incrementado la desaparición de muchas especies importantes para el equilibrio ecosistémico.

    Una eficiente educación ambiental es el paso primordial para desarrollar y fortalecer la conciencia ecológica. Las acciones nocivas de los seres humanos tienen grandes consecuencias y esto muchas veces no es algo de lo que estamos plenamente conscientes.

    Mediante el despliegue eficaz de programas de educación ambiental desde la educación inicial es posible despertar en los ciudadanos el sentido de responsabilidad sobre sus acciones, ciertamente el cambio proviene de cada persona, pero esto debe tener alcance hasta las grandes industrias y profundizar en todas las actividades humanas.

    Colaboración internacional: esfuerzos conjuntos para salvar a estas especies

    La colaboración internacional es un aspecto que se ha ido desarrollando desde hace varios años. La Conferencia sobre el Comercio Internacional de especies Amenazadas de Fauna y Flora (CITES) es un ejemplo de esta cooperación globalizada.

    Este organismo, actualizó las regulaciones sobre el comercio de especies, incluyendo aquellas que están en peligro debido al tráfico ilícito, la sobrepesca, la caza furtiva o cualquier tipo de sobre explotación. Actualmente se consideran especies de anfibios y reptiles los cuales se han convertido en mascotas debido a la difusión de ideas erróneas sobre su tenencia y cuidado.

    La Cumbre de las Naciones Unidas, también ha inaugurado en 2021 la “década de la biodiversidad” pues propone enfocarse en este aspecto los próximos diez años de manera intensiva.

    Muchos organismos relacionados en todo el globo coinciden en que progresar hacia las metas establecidas dentro de Objetivos de Desarrollo Sostenible ha sido muy lento y en realidad la tasa de extinciones ha aumentado.

    La Convención de las Partes sobre Diversidad Biológica ha enviado un claro mensaje sobre proteger la biodiversidad como base de la agenda 2030 de las Naciones Unidas.

    Como podemos observar son muchas las organizaciones preocupadas por el futuro de la biodiversidad, las colaboraciones van más allá de convenciones y cumbres, ya que existen organizaciones enfocadas en trabajar de manera internacional para desarrollar estrategias prácticas y eficientes para preservar algunas especies.

    La Lista Roja de la UICN: una herramienta crucial para evaluar el riesgo de extinción

    La lista Roja de UICN o Lista de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza es la fuente de información más exacta cuando se trata de reflejar el estado de conservación de algunas especies de animales, plantas y hongos.

    Esta lista es un indicador sobre la salud de los ecosistemas y la biodiversidad mundial. Actualmente se ha convertido en una herramienta para obtener información y canalizar estrategias para la conservación en lo que se refiere a políticas de Estado.

    Informa la distribución, tamaño de la población, estado del hábitat, usos de tráfico, amenazas y acciones propuestas o desplegadas para su conservación. Es un sistema sencillo porque sus criterios se entienden fácilmente y utiliza nueve categorías:

    1. No evaluado

    2. Datos insuficientes

    3. Preocupación menor

    4. Casi amenazado

    5. Vulnerable

    6. En peligro

    7. En peligro crítico

    8. Extinto en estado silvestre

    9. Extinto

    Especies que se benefician de medidas de conservación exitosas

    Actualmente es larga la lista de especies que están siendo asistidas para su conservación algunas son:

    El Oso panda gigante, la nutria, las toninas, la danta, las tortugas marinas, los manatíes y otros mamíferos acuáticos, el oso andino, Oso de anteojos, Cocodrilo de Tumbes, Pava aliblanca, Jaguar, Suri, Mono choro cola amarilla, el rinoceronte negro, la ballena jorobada, gorila de montaña, leopardo de las nieves, entre otros.

    Perspectivas para el futuro: esperanzas y desafíos en la lucha por su supervivencia

    Las perspectivas no son tan prometedoras, sin embargo, hay un gran despliegue internacional y nacional en muchos países para preservar las especies que se encuentran en riesgo. Son cada vez más los organismos que se suman a esta iniciativa para salvaguardar las especies amenazadas.

    Siguen existiendo grandes retos, entre ellos despertar la conciencia en las grandes industrias para reducir la contaminación y el impacto de los residuos y desechos, ya que este es un factor determinante en la destrucción de los hábitats.

    Especies en extinción y su valor económico y cultural

    La alimentación de los seres, el clima y la disposición de agua de buena calidad dependen en buena medida del equilibrio ecológico, la biodiversidad colabora activamente en la salud de los ecosistemas, ya que estos forman una red de interdependencia entre los animales, las plantas, y la población fúngica y bacteriana.

    Los polinizadores ayudan a la distribución de muchos vegetales que proporcionan alimentos, además la cultura se afianza sobre muchas de estas relaciones y provee un soporte para el desarrollo económico de muchas regiones.

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    Historias destacadas: casos de éxito en la recuperación de especies amenazadas

    Alrededor del mundo existen muchos casos exitosos en las estrategias de conservación, veamos cuatro de ellos:

    El Tigre:

    Mediante el programa de conservación “Programa Global de Recuperación del Tigre”, desplegado hace 8 años, la población de tigres aumentó su población en 40% entre el 2015 y el 2021. Se han desarrollado 12 proyectos en India, Blangladesh, Bután, Nepal e Indonesia.

    Lince Ibérico:

    Gracias a los proyectos del programa “Wildbook for Iberian Lynx” se ha alcanzado aumentar la población, y se cuenta con 750 hembras reproductoras.

    Mono Tití de Olalla:

    Esta especie endémica de Bolivia que gracias al “Programa Gran paisaje Madidi-Tambopata” fruto de la coordinación de la sociedad para la conservación de la Vida Silvestre” existen aumentos de su población silvestre y además se ha recuperado su hábitat en más de 100 km cuadrados.

    Tortuga Carey:

    Están amenazadas por la caza furtiva y se encuentran en peligro crítico.  El proyecto «Tortugas Marinas de Barbados” ha tenido resultados exitosos, actualmente más de 500 tortugas desovan cada día en las playas sin peligros de ser atrapadas, vendidas o puestas en cautiverio.

    Efectos en cascada: el impacto de la extinción de estas especies en los ecosistemas

    Como ya hemos expuesto anteriormente, el equilibrio ecológico tiene una razón de ser. De forma natural cada especie cumple una función sistémica, al desaparecer una especie, estas funciones recaen sobre otra especie, la cual tiene a su cargo un rol para el que puede no estar adaptada.

    Esto significa que a largo o corto plazo esta especie también pase a estar en riesgo de desaparecer. Toda esta cadena termina en la degradación del hábitat y el ecosistema que las alberga.

    La necesidad de políticas gubernamentales más sólidas para proteger a estas especies

    Se necesitan políticas gubernamentales que se aboquen a la solución real de los problemas ambientales que inciden sobre la desaparición de las especies, el cuidado del hábitat natural debe ser primordial y superar en interés otros factores, como los políticos y económicos.

    Los gobiernos deben asumir la protección del ambiente como una responsabilidad que se prioriza por sobre otras, especialmente en lo que se refiere a controlar el tráfico de especies y la explotación de los recursos naturales.

    Para ello, es indispensable que se destinen recursos a proyectos de conservación, que se amplíen los radios de acción de los organismos para la preservación del medio natural.

    Las ONG y su labor en la conservación de especies en peligro

    Las organizaciones no gubernamentales han tenido un rol destacado en la preservación de las especies en riesgo de extinción. En Colombia, por ejemplo, existen alrededor de 13 ONG abocadas a luchar por la protección de más de 1200 especies de diferentes categorías que se encuentran en la lista roja.

    Muchas de estas ONG reciben apoyo técnico, logístico y económico de organizaciones y ministerios gubernamentales y organismos internacionales como Wildlife Conservation Society (WCS), y de las Naciones Unidas, el proyecto Vida Silvestre y la Fundación Humedales, entre otras.

    La importancia de la preservación de hábitats clave para la supervivencia de estas especies

    Preservar los hábitats es un punto clave cuando se trata de la conservación de la biodiversidad global. Ya hemos explorado la importancia de cuidar los espacios naturales en donde viven, se alimentan y se reproducen las especies amenazadas como factor primordial para su preservación.

    Conservar los hábitats garantiza y asegura los servicios ambientales o ecosistémicos para que cada especie que lo habite pueda satisfacer sus necesidades de regulación y soporte de la vida silvestre.

    La responsabilidad individual en la protección de estas especies

    Existe una responsabilidad individual frente a toda esta problemática. Cada persona debe asumir un rol participativo, comprendiendo, en primer lugar, el impacto ambiental de sus acciones. Por otra parte, hay prácticas que podemos implementar para no ser agentes contaminantes cuando visitamos un ecosistema natural.

    El turismo sostenible, las prácticas de ganadería y agricultura sostenible y evitar la compra de especies silvestres pueden ser los primeros pasos. Es nuestra responsabilidad informarnos sobre las especies en extinción y brindar nuestro apoyo a las acciones que se desarrollan para protegerlos.

    Acciones que podemos tomar para ayudar a preservar a estas especies en peligro

    Preservar las especies en peligro requiere de diferentes acciones, entre ellas:

    • Invertir en infraestructura verde.
    • Incentivar la producción de energía sostenible.
    • Estimular y financiar métodos de producción de alimentos y materiales de forma sostenible.
    • Aprovechar el agua de forma racional y eficiente.
    • Brindar apoyo a las etnias para proteger sus hábitats y formas tradicionales de sustentar la vida y resguardar sus recursos naturales.

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