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Tipos de biodiversidad: cuáles son, componentes, importancia y dónde se desarrollan

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Por: Alcaldía de Medellín |

En principio, es primordial definir cabalmente la biodiversidad y sus componentes para comprender su importancia en la preservación de la vida del planeta y las amenazas...

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  • En principio, es primordial definir cabalmente la biodiversidad y sus componentes para comprender su importancia en la preservación de la vida del planeta y las amenazas que enfrenta gracias a los 23 problemas ambientales de este siglo. Comencemos:

    ¿Qué es la Biodiversidad?

    Este término, se acuñó en 1986, proviene de combinar las palabras “diversidad biológica”. Podemos definirla como la pluralidad de vida dentro de un ecosistema.

    Si quieres explorar más sobre los ecosistemas te recomiendo nuestro artículo Qué es un ecosistema, tipos, funciones y 15 ejemplos de los más comunes.

    La biodiversidad de un ecosistema puede estar compuesta de insectos, anfibios, plantas y algunos microorganismos que no podemos observar a simple vista.

    En suma, todos los elementos de los ecosistemas interactúan para crear el equilibrio ecológico que definimos como biodiversidad. Gracias a la diversidad podemos disfrutar de condiciones para que la vida se sustente en cada uno de los ecosistemas desarrollando ciclos de crecimiento y evolución.

    Hay varios tipos o niveles de biodiversidad, cada uno considera un aspecto específico, determinado por sus componentes, de la variedad biológica.

    ¿Cuáles son los tipos de biodiversidad?

    La biodiversidad es la forma de describir una agrupación de distintos organismos que se interrelacionan dentro de un ecosistema. Por lo tanto, se consideran tres tipos o niveles de biodiversidad:

    1. Diversidad Genética

    2. Diversidad de Especies

    3. Diversidad del ecosistema.

    A continuación, explicaremos con más detalle cada uno de los tipos de biodiversidad:

    1.- La Diversidad Genética, importancia y características:

    Este tipo de biodiversidad es la menos conocida. Definirla y ofrecer sus características puede resultar confuso debido a que son nociones científicas que muchas veces escapan al entender de la mayoría de las personas.

    Para explicarlo de una forma sencilla, la diversidad genética se refiere a las variaciones que se observan en los genes de los organismos vivos. En otras palabras, las variantes que hay en la información de material hereditario, el cual se transmite de una generación a la siguiente entre seres de la misma especie.

    Entonces, podemos definir la biodiversidad genética como un componente que se relaciona directamente con la evolución natural de las especies.

    La información del código genético, provee a las especies de esta gran capacidad adaptativa, mediante la presencia de una variedad específica de genes. Un ejemplo, lo encontramos en las jirafas, a las cuales un cuello bastante largo, les permite obtener alimentos de las copas de los árboles en sabanas con escasa vegetación.

    Podemos comprender la importancia de este tipo de biodiversidad si consideramos que las especies no podrían subsistir sin la capacidad de adaptarse a su hábitat, e incluso de adaptarse a cambios o condiciones del cautiverio, en algunos casos. Además, esta diversidad genética promueve la evolución de las especies.

    Por otro lado, la variedad en la composición genética única de cada individuo dentro de una especie hace posibles miles de combinaciones y mientras más variada sea una especie, más oportunidades tendrá de perpetuarse.

    2.- Biodiversidad de especies: importancia y características

    La diversidad de las especies es un aspecto que abarca todas las especies que cohabitan dentro de un ecosistema y que comparten características comunes.

    Cuando nos referimos a la diversidad de especies, podemos caracterizarla como especies que comparten un espacio natural específico, presentan condiciones similares de adaptación y comparten varias conductas de subsistencia.

    La biodiversidad de las especies está definida por la increíble variedad de especies que existen en todo el mundo. Estas especies forman una unidad básica de clasificación. Esta agrupación en unidades permite el estudio de los organismos y su clasificación en base a las características biológicas comunes.

    La diversidad de las especies es muy importante para la preservación del equilibrio ecológico, y es el resultado de complejos procesos evolutivos a lo largo del tiempo.

    3.- Biodiversidad de ecosistemas: características e importancia

    Este nivel describe las zonas específicas en las que se desarrolla la vida y se dan a lugar todas las relaciones propias de un bioma. Estas áreas geográficas, comparten características únicas que favorecen el desarrollo y supervivencia de un grupo de especies.

    Algo que caracteriza esta diversidad, es el hecho de que todas las especies dependen directamente de su ecosistema y son de gran importancia para conservar el delicado equilibrio biológico que permite al ecosistema cumplir sus funciones.

    Hay tres tipos de ecosistema, acuáticos, terrestres y mixtos. Desde la perspectiva ecológica, la diversidad de los ecosistemas incluye las relaciones bidireccionales entre los organismos vivos y los elementos como el suelo, el aire o la luz solar.

    Dentro de los ecosistemas se encuentran a la vez, tres tipos de biodiversidad: Alfa, Beta y Gamma. Veamos de qué trata cada una de estas clasificaciones:

    Diversidad Alfa:

    Se refiere a la biodiversidad dentro de una zona específica, se define por la misma comunidad o ecosistema y el número de especies o grupos de especies, según la familia o género taxonómico.

    Diversidad Beta:

    Esta categoría se refiere a las relaciones ecológicas que se desarrollan entre la diversidad de especies de un ecosistema y las especies de otro. También incluye las relaciones entre especies de un mismo ecosistema con diferentes niveles ambientales.

    El estudio de la diversidad Beta permite obtener información cuantitativa sobre las especies de los ecosistemas que están sujetos a deterioro ambiental o son susceptibles a cambios ambientales.

    Diversidad Gamma:

    Es un tipo de biodiversidad de ecosistemas que se enfoca en la descripción de las riquezas del ecosistema. Involucra las especies, los grupos de especies, y los recursos en un grupo de ecosistemas dentro del un mismo bioma.

    Los ecosistemas ofrecen muchos beneficios, entre ellos, la posibilidad de disfrutar de las bellezas naturales. Por esta razón, es importante promover Modelos Amigables para un Turismo Sostenible.

    Componentes de la Biodiversidad: genes, especies y ecosistemas.

    Los genes

    Los genes son los componentes vitales, forman parte del ADN de cada individuo. Este componente determina las cualidades particulares de cada individuo, es la diferencia observable o no, en los individuos que forman una especie, la variedad en los cultivos, las diferentes razas de animales, entre otros ejemplos.

    Los genes y la información que transmiten forman parte de los mecanismos que favorecen la supervivencia de cada especie en el globo terráqueo.

    Las especies:

    Se han clasificado alrededor de dos millones de especies. No obstante, como ya te adelantamos, se estima que pueden existir más de cien millones de especies. Contando desde las criaturas unicelulares hasta las especies que habitan las zonas abismales marítimas, de las que todavía, se conoce muy poco.

    ¿Qué es una especie? La especie se define como el grupo de organismos que son capaces de reproducirse entre sí y garantizar una descendencia fértil. Los individuos de una especie son identificables porque tienen similitudes físicas y conductuales obvias y apreciables a simple vista.

    Los individuos de la misma especie son similares en forma y función, entonces, cada especie se caracteriza porque todos los individuos comparten atributos que permiten clasificarlos dentro de un grupo biológico y una misma categoría.

    Los ecosistemas:

    Los ecosistemas son espacios en los que se desarrollan relaciones vitales entre grupos específicos de microorganismos que viven y se interrelacionan en este hábitat y mantienen un equilibrio biológico que permite perpetuar la vida.

    Los ecosistemas se clasifican de acuerdo a la superficie en la que se desarrollan. Pueden ser terrestres, acuáticos y mixtos. Los primeros, son ecosistemas que se desarrollan sobre la corteza terrestre, como bosques, selvas, tundras, sabanas, praderas, dunas, desiertos, entre otros.

    Los acuáticos, se desarrollan en el agua salada o dulce. Corresponde a mares, océanos, lagos, lagunas, ríos, y ojos de agua.

    Los mixtos, son aquellos en los que se combinan ambas superficies, los ejemplos más conocidos son los pantanos o humedales, las marismas, manantiales superficiales y los manglares.

    Importancia de la biodiversidad para los ecosistemas y el planeta

    La biodiversidad es un elemento esencial para la sobrevivencia del planeta. Es, además valioso un recurso estratégico para el sostenimiento de los seres humanos.

    La biodiversidad es la espina dorsal de los ecosistemas. Por esta razón, la pérdida de la biodiversidad significa la pérdida del equilibrio biológico y ecológico, sin los cuales es imposible mantener la vida en nuestro planeta.

    La biodiversidad permite el desarrollo y sostenimiento de los diferentes ecosistemas, y estos a su vez, nos ofrecen muchos beneficios, entre ellos, la obtención de alimentos, materia prima y recursos energéticos.

    Las relaciones entre cada organismo favorecen que los ecosistemas se desarrollen y sean modelos sostenibles de frente a la biodiversidad y viceversa. Por ejemplo:

    • Los bosques propician la regulación natural de la temperatura.
    • Las abejas contribuyen a la polinización.
    • Una cuarta parte de las especies marinas se alberga en los arrecifes de coral. Además, esta barrera protege las costas.
    • En los manglares queda atrapado un alto porcentaje del dióxido de carbono de la atmósfera.

    Así, podemos continuar con esta lista infinita de razones por las que la biodiversidad es importante para los ecosistemas y el planeta. La diversidad biológica posee un alto valor intrínseco y constituye el sustento de muchas actividades humanas.

    Es importante conservar la biodiversidad para proteger la estabilidad de los ecosistemas, de los que recibimos tantos beneficios y servicios, que son imprescindibles para el desarrollo de los seres humanos. En este contexto, te invito a leer nuestro artículo Agricultura Sostenible como una clave para el bienestar de las sociedades.

    La biodiversidad en ambientes terrestres: bosques, selvas, desiertos y otros

    Los principales ecosistemas terrestres son los bosques, selvas, desiertos y páramos. Veamos la biodiversidad que presentan:

    Los primeros, presentan mucha variación, encontramos bosques frondosos, secos, de coníferas, templados y subtropicales, por mencionar algunos. La vegetación de los bosques frondosos suele poseer árboles de hojas anchas y grandes; los coníferos, tiene árboles de hojas aciduladas.

    La vegetación y la fauna varían mucho de un tipo de bosque a otro.

    Los bosques secos suelen tener lluvias menos abundantes y se localizan en México, Caribe y el sudeste de Asia. Los bosques templados, están en zonas con menos humedad, pero tienen épocas de abundante lluvia, son ejemplo de ellos, los bosques mediterráneos.

    Las selvas, son un tipo de bosque frondoso, con la cualidad de una biodiversidad mucho más rica y exuberante, tanto en su flora como en su fauna, el mejor ejemplo lo constituye la selva Amazónica.

    Otros ecosistemas terrestres muy extensos son la taiga, la tundra y el desierto, que tienen una biodiversidad característica, con muy poca vegetación que usualmente es xerófila y animales muy adaptados al entorno.

    La tundra y la taiga se ubican en zonas muy frías por lo que se encuentran algunos líquenes, Canadá, Rusia y la Península Escandinava son ejemplos de este tipo de ecosistema.

    El desierto, por el contrario, es típico de zonas muy calientes durante el día y muy frías durante la noche; humedad reducida y escasas precipitaciones. Su vegetación es xerófila por excelencia, pocos arbustos de hojas escasas y muy resistentes y algunas plantas de hojas carnosas como los cactus; con animales pequeños que sobreviven generalmente debajo de las arenas y dunas.

    Los matorrales y el arbustal, son ecosistemas que no poseen árboles, solo vegetación de tamaño mediano, están muy dispersos en todo el mundo.

    Los páramos se asocian con climas de montaña con bastante humedad. Su flora presenta vegetales perennes, árboles pequeños y arbustos, musgos, líquenes y pasto. Entre su biodiversidad se destacan los venados, palomas, patos, reptiles, roedores, anfibios, aves, patos y algunos camélidos (Latinoamérica).

    Las sabanas, por su parte, son ecosistemas con mucho espacio apto para la ganadería. Suelen tener una vegetación gramínea, con pastizales o hierbas pequeñas. Abundan las aves, los reptiles, roedores, aves y mamíferos. Es común que tengan dos temporadas muy marcadas: sequía y lluvia.

    Biodiversidad en ambientes acuáticos: océanos, ríos, lagos y otros:

    Los ecosistemas acuáticos cuentan con mucha vegetación, fauna y todo tipo de microorganismos. Hay dos tipos, los marinos y los de agua dulce.  En ambos abundan las especies de animales y vegetales.

    En los ecosistemas marinos podemos observar una cantidad muy grande de especies, como esponjas marinas, peces, moluscos, mariscos, mamíferos acuáticos como el delfín, medusas, caracoles, anémonas de mar, artrópodos, equinodermos, pulpos, entre otros. La biodiversidad marina abarca también muchos microorganismos, las algas y el plancton.

    En los ecosistemas de agua dulce, encontramos anfibios como la salamandra, ranas y sapos; peces en una gran variedad como las truchas, rayas, serpientes acuáticas, entre otros. Los mamíferos y las aves son una constante en ambos tipos ya que se adaptan fácilmente. Por ejemplo: pingüinos, morsas, nutrias, leones marinos, toninas, gaviotas, patos, pelícanos, cigüeñas, gallinazos, entre otros.

    Biodiversidad en ecosistemas marinos: arrecifes de coral, manglares y marismas

    Los arrecifes de coral son el hábitat de especies marinas. Por ejemplo: almejas, estrellas de mar, erizos de mar, peces, esponjas, ostras, cangrejos, microorganismos marinos, entre otros.

    En las marismas, la vegetación suele ser muy escasa debido a la salinidad, pero se encuentran algunas hierbas adaptadas llamadas plantas halófitas. La fauna se compone de pequeños mamíferos, invertebrados y muchas aves como gaviotas, garzas, cigüeñas, águilas pescadoras y aguiluchos. Igualmente suelen existir algunas especies de roedores, jabalíes, mapaches, felinos, peces como el salmón, el lenguado y el barbo.

    Una particularidad de las marismas, es que suelen ser utilizadas para criar ganado, por lo que pueden encontrar cabras, vacas, equinos y cerdos en sus alrededores, además de una gran variedad de anfibios.

    Los manglares, por su parte, presentan mucha más variedad en la vegetación, hay muchas especies de plantas, árboles, arbustos y animales acuáticos como algunas variedades de peces, anfibios, reptiles, crustáceos, moluscos, cangrejos y mamíferos. Son animales característicos de este ecosistema los cocodrilos, caimanes, lagartos, serpientes como la cobra, camarones, buitres, gavilanes, lombrices, tortugas, y monos.

    Biodiversidad en ecosistemas de agua dulce: humedales, lagos y ríos

    En todos ellos se encuentran variedades de peces, anfibios y moluscos. La vegetación suele ser abundante con pastizales, hierbas y arbustos adaptados a la humedad constante.  En los lagos y lagunas la biodiversidad suele ser menos variada debido a la inamovilidad del agua.

    Por el contrario, los pantanos, humedales y ciénagas tienen mayor abundancia en especies.  Es común encontrar roedores, reptiles pequeños o grandes, algunos mamíferos y muchas especies de aves pescadoras.

    Biodiversidad en ecosistemas polares: Ártico y Antártida

    En los ecosistemas polares hay una variedad de fauna particularmente adaptada, entre ellos, destacamos algunas especies de pingüinos, ballenas, morsas, focas y leones marinos. Existen algunas especies de anfibios, reptiles y anfibios.

    Abundan el zooplancton y los microorganismos.  Hay pocas aves, los mamíferos tienen abundante pelaje, como el oso polar, el lobo ártico, la liebre ártica, el zorro ártico, los renos, el buey almizclero y el búho nival.

    La flora debido a las condiciones climáticas es muy escasa, pero hay más de 90 especies endémicas. Los musgos y líquenes son los más frecuentes y otras variedades se pueden observar durante el verano.

    Biodiversidad en ecosistemas urbanos: importancia y desafíos

    Este es un tópico importante debido al impacto negativo en el medio natural. La creciente urbanización afecta la biodiversidad porque causa desnutrición de los hábitats, contaminación y la introducción de especies exóticas.

    El ecosistema urbano debe contribuir a la preservación del ambiente. En este punto, la Educación Ambiental tiene un firme propósito de concientización. La biodiversidad atiende a demandas sociales cada vez mayores, por lo necesita enfocarse en las soluciones para enfrentar sus desafíos más relevantes:

    Implementar métodos de manejo de desechos y residuos domésticos e industriales para reducir la contaminación acústica, de los suelos, las aguas y la atmósfera.

    Buscar métodos para mitigar el efecto de “isla de calor”, reduciendo a la vez el consumo energético.

    Promover la multiplicación de la biodiversidad, implementando corredores verdes y desarrollando espacios naturales urbanos.

    Y tú…  ¿Ya conoces los objetivos de Desarrollo Sostenible?


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