El proceso formativo de la RMM busca el desarrollo de competencias en el ser, el saber y el hacer, tiene como ejes transversales lo socio-afectivo y los grados de dificultad del repertorio. La formación interpretativa se enriquece con la reflexión y la creación, utilizando la música como una herramienta para imaginar, relatar y transformar la multiplicidad de universos que habitan los niños, niñas, adolescentes y jóvenes.
A partir del Aprendizaje Basado en Proyectos (ABP), se integra la música a los contextos territoriales, dando cuenta de la diversidad y pluralidad de los territorios y propiciando el diálogo de saberes y la construcción participativa. El modelo pedagógico de la Red cuenta con tres referentes: la pedagogía social, la pedagogía crítica, y las pedagogías afectivas.
Es a través de las prácticas en conjunto, desde la iniciación musical, hasta la conformación de agrupaciones y ensambles, que se propicia el paso del yo individual al nosotros social. Allí, los contactos, intercambios e interacciones, facilitan conocerse, reconocerse y convivir en la diversidad y la diferencia de sus singularidades, construyendo tejido social y cultura ciudadana.